Tómatelo con calma

Si tu camino va a ser eterno, no te limites a esperar una recompensa final y aprovecha disfrutando del y durante el viaje.

El alcoholismo es una enfermedad crónica e irreversible, la recuperación alcohólica es permanente y eterna. Comprender que ya no vamos a poder volver a beber o consumir no debe tomarse como una condena sino como una liberación.

¿Qué sentido tendría angustiarse porque ya no vamos a volver a beber si sabemos que el consumo es quién nos está llevando a la destrucción?

Por eso, si emprendemos ese camino de retorno a la vida … no hay que ponerse ansiosos ni impacientarse. Todo lo contrario, hay que tomárselo con mucha calma.

Hay que saber disfrutar de la recuperación. Ésta es la única que nos hace conseguir la victoria. No importa los obstáculos ni las adversidades que podamos encontrar al inicio, porque con el tiempo y mucho trabajo allanaremos el camino y recorrerlo será un placer, una maravilla y una tranquilidad tan grande que cualquier persona intoxicada no puede ser capaz de comprender.

«Step by step». Despacio, con tranquilidad, recobrando la seguridad y la confianza, y especialmente desprendiéndose de las sombras de ese submundo que convirtió nuestras vidas en un infierno.

Nunca midas el tiempo de recuperación, mide la calidad de vida que ésta te va dando paso a paso