¡Todo,menos dejar de beber!

 

«Nunca me pidas que deje de beber» Nicolas Cage,Leaving Las Vegas

En este caso fue una película oscarizada explicando la sobreacogedora historia de un alcohólico en pleno período de autodestrucción quien hizo la afirmación,pero en la vida real los testimonios de alcoholismo superan a la ficción.

Personalmente yo lo dije muchas veces,o lo que es lo mismo;quise trasmitirlo a aquellos que estaban a mi lado. Tal vez no fuere la misma frase o expresión,pero el contenido del mensaje era el mismo.

Hay muchas formas de decir «pídeme todo,menos dejar de beber»: «Ya me conociste bebiendo. Yo soy así … Forma parte de mi forma de ser. Te prometo que cambiaré,beberé menos,intentaré controlar,no pillaré estas tajadas,pero dame una oportunidad para demostrarte que sé beber»

Evidentemente la agresividad y el tono de esta expresión depende mucho de la fase de alcoholismo en que ya nos encontremos,de la poca capacidad cognitiva que tengamos para poder entender la enfermedad,y de el extremo de autodestrucción a la que nos ha llevado el alcohol.

Mientras nos quede una esperanza de solucionar la situación pudiendo manipular o empleando nuestros «recursos alcohólicos» como el chantaje emocional,la anulación de las personas codependientes,o la mentirá en todo su esplendor,nuestro mensaje carecerá de agresividad pero tendrá la misma intencionalidad.

Un enfermo alcohólico necesita y desea tanto beber,que es capaz de prometer e incluso hacer cualquier cosa antes que dejar el consumo.

Esa es la verdadera fuerza y atracción del alcohol. No se limita a un simple vicio o conducta de terquedad,sino que cuando has enfermado,no creo que exista fuerza mayor que el deseo de beber.

De todos modos,siempre hay que saber interpretar un lenguaje alcohólico para poder entender el verdadero significado que se esconde detrás de las palabras crueles propias de el. «Nunca me digas que deje de beber» significa «Estoy muy enfermo,por favor…¡Ayúdame! «[youtube]http://youtu.be/XIycEe59Auc[/youtube]