¿Te puedes convertir en alcohólico sólo bebiendo cerveza?

Esta pregunta es la que más me hacen los adolescentes o jóvenes cuando acudo a dar charlas. Pero la confusión no sólo existe entre ellos,sino en una gran mayoría de la población que piensa que consumir un tipo de bebida es menos perjudicial y con menos riesgo.

Todos sabemos que la bebida fermentada(cerveza,vino,etc.) contiene mucho menos graduación alcohólica que la destilada (la que utilizamos para combinar normalmente como el ron,la ginebra,vodka,etc.) pero eso no significa que con un mal uso o abuso de ella,no sea igual de peligrosa para enfermar.

De hecho,este tipo de bebidas se «camuflan» mejor entre la sociedad incluso resaltando beneficios saludables con su consumo y presentando una buena imagen con un gran «envoltorio» muy bien diseñada. Los creativos publicitarios han encontrado un filón:el mensaje siempre es el mismo,sólo cambia la marca.Nos la anuncian como un nexo de relaciones sociales,siempre en ambientes sanos,naturaleza,playas,música suave,nos invitan al amor y al bienestar,y nos la disfrazan de ser parte de nuestra cultura y nuestra forma de ser. Además,tiene una intencionalidad en mostrarla como refresco y nunca como una droga,evidentemente.

Soy muy crítico con esa confusión que nos pretenden crear. Parece mentira que en el S XXI todavía caigamos en la trampa de dejarnos influenciar y embaucar tan fácilmente.

En alcohólico nadie se «convierte»,sino que se enferma. Convertirse se convierten los vampiros y esas cosas de ciencia ficción o cómics. 

Por si sirve de ayuda mi experiencia personal como respuesta a esta pregunta tan típica y tópica,yo empecé bebiendo cerveza y sólo la consumía exclusivamente durante casi veinte años. Al tener poca graduación y poder beber mucha cantidad,cada vez fui necesitando más para conseguir el efecto deseado (tolerancia). Llegué a beber cantidades ingentes en cualquier día de la semana,porque con unas «cuantas» no me era suficiente. De hecho me jactaba de saber beber y no ser un alcohólico o drogadicto porque creía que al sólo beber cerveza,eso era imposible que me sucediera. Los últimos años empecé a mezclarla con whisky a palo seco para que me «subiera» el colocón. Luego vinieron los tranquilizantes para contrarrestar los efectos de esa intoxicación,y así entré en una espiral de consumo en la que no sólo había enfermado,sino que no iba ningún día sobrio.

Pero durante ese proceso,ya desde los inicios,cuando salía de marcha,lo hacía a emborracharme «para desconectar». Y con grandes cantidades de cerveza,cogía las mismas intoxicaciones que los que consumían otras bebidas.

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