«Sobrados»
«Podemos imaginarlo todo,predecirlo todo,salvo hasta dónde podemos hundirnos» Emil Michel Cioran
Es fácil ser bravucón,fanfarrón,enterado ( a veces,incluso iluminado) en tu pequeño entorno,al que mejor defino como mundo alcohólico creado por uno mismo por ser incapaz de vivir en otro posible, y aparentar tener un gran control de la situación y una gran seguridad en sí mismo. Todo eso,por supuesto,acompañado de una o varias copas en la mano.
Pero ese mismo sujeto,cuando lo sacas apenas unos metros de su «círculo», …se desmorona. Ya no es nadie. Se convierte en otra persona:inseguro,complaciente,dudoso y temeroso.
Ser el gallito en el gallinero es sencillo. Tener controlada la situación a base de una falsa apariencia,excesiva generosidad,manipulación y complicidad interesada,hace que todo funciones bien. En el mundillo del alcohol eso es muy habitual y corriente.
Durante un tiempo podemos ir de «sobrados»» por la vida, pero losproblemas vienen cuando el alcohol empieza a manejar las riendas de nuestra vida y esa actitud tan alabada y elogiada por nuestro entorno próximo interesado,ya se ve perjudicado. En un instante pasas de ser aquel hombre mágico y encantador a todo lo contrario;un conflictivo y desgraciado.
Los alcohólicos tenemos una gran fuente de recursos asociados a la manipulación:perdemos un mundo,al acto creamos otro similar. Pero como todo en la vida,esto se acaba, y ese gallito empieza a desplumarse o descrestarse.
Son infinitas las consecuencias del exceso o abuso del alcohol por no hablar del alcoholismo en sí como enfermedad. Infinitas y variadas:desde las archiconocidas físicas,a las más complejas de autoreconocer como las psíquicas y sociales. Pero de todos modos,sean cuales fueren,todas normalmente tienen el mismo final;drama,tragedia,destrucción.
En definitiva: de sobrados …¡nada![youtube]http://youtu.be/dluHzQhLcME[/youtube]