Sin rencores
«El que domina su cólera domina a su peor enemigo» Confucio
Dejar de beber tiene que ser un proceso de «desenfadarse».
No hay persona vencida por el alcohol que no esté cabreada consigo misma y con el mundo. Forma parte de la enfermedad.
Una trayectoria alcohólica son años de disputas,conflictos,tramas,conspiraciones paranoides, y susceptibilidades. Mala educación,insultos y ordinariez. Despropósitos,comportamientos inadecuados,y despechos.Enfados continuos,discusiones,y mentiras. Son el resultado de un gran repertorio impregnado de ira,odio,y mucho rencor acumulado.
El recuperarse nunca debe actuar como detonante de rabia o represalia,sino todo lo contrario;como una oportunidad de hacer las paces con uno mismo.
El rencor puede alimentarse del alcohol,pero cuando se entierra a éste,el otro debe ir detrás en la misma caja.
Dudo que sirva de algo hacer un esfuerzo pleno de superación personal que va mucho más allá de la simple abstinencia como es el dejar de beber para retomar el vivir mientras el odio y rencor permanezca en nosotros.
El tener una actitud positiva en la recuperación,a pesar de lo que haya sucedido en nuestros años de enfermos en activo,es la clave, si no para alcanzar la felicidad,al menos mejorar y estar tranquilos.
Recuperación y rencor …no son compatibles.