¡Quiero ser un bicho raro!

Si ser un bicho raro es no depender de ninguna sustancia que altere mi percepción de la realidad, no necesitar ningún sustituto artificial para enfrentar y afrontar las adversidades de la vida, y no tener una pócima mágica de la felicidad embotellada … ¡Quiero ser un bicho raro!

Si ser un bicho raro es no seguir el rollo a esta sociedad, no hacer lo que todo el mundo hace,y  no aguantar gilipolleces ni las mismas «conversaciones elípticas» (esas que, aunque pasen los años y los personajes sean diferentes, los temas son los mismos)… ¡Quiero ser un bicho raro!

Si ser un bicho raro es tener que forzar la diversión, hacer el payaso para buscar la aprobación ajena, seguir y mantener conversaciones por condescendencia, estar en lugares y ambientes que no me apetece, y ser asertivo y tener que empatizar constantemente aunque sea por hipocresía … ¡Quiero ser un bicho raro!

Si ser un bicho raro es no someterme a la cultura de la inmediatez, los resultados rápidos y sin sacrificio ni esfuerzo, de crear una personalidad de veleta en la que constantemente me tenga que adaptar a la de los demás, agradar y tener contento a todo el mundo, … ¡Quiero ser un bicho raro!

Si ser un bicho raro es ser sociable obligatoriamente, aparentar ser feliz y que todo me va bien, disimular con frecuencia mis sentimientos y emociones para no parecer débil, y vivir permaneciendo en la mentira, la fantasía, la tontería, y la mediocridad … ¡Quiero ser un bicho raro!

Finalmente, si ser un bicho raro significa no beber alcohol para poder relacionarme y adaptarme a esta sociedad aunque ello signifique quedarme solo o no tener nadie con quien compartir una realidad cierta y no poder contemplar los pequeños detalles que son los que de verdad construyen la vida propia y no la ajena, … ¡Sí, me ratifico: Quiero ser siempre un bicho raro!