No huyas de ti mismo por tener problemas de alcohol;¡Afróntalos!
Muchas personas piensan que por huir o cambiar de vida, van a escapar de sus problemas. En realidad, esos fantasmas … siempre te acompañan a donde te dirijas.
No reconocer o aceptar un problema o enfermedad de alcoholismo, ¡No es la solución!
Negarlo o compararse con los demás a ver quien la tiene más grande, ¡No es la solución!
Disimular, camuflar u ocultar las consecuencias, ¡Tampoco es la solución!
Minimizar, desdramatizar, suavizar o adornar nuestros comportamientos para hacer ver que son mucho menos de lo que en realidad son, ¡No es ninguna solución!
La solución pasa por todo lo contrario: Afrontar, vencer los miedos, temores e inseguridades, enfrentarse al problema, coger el toro por los cuernos, decir:¡Basta ya!, aceptar, reconocer, y por supuesto … reaccionar.