De este infierno, ¡Se sale, nadie te saca!
Estoy harto de ver como la gente busca recompensas sin hacer ningún esfuerzo para lograrlas.
Siempre, y sin cansarme nunca, hablo de perseverancia, firmeza, paciencia, tenacidad, constancia, entrega, disciplina, compromiso.
Un alcohólico o una persona con problemas de abuso o consumo prolongado, tiene dos opciones: salir y recuperarse o continuar consumiendo y agonizar mientras su vida se apaga y destruye.
He dicho salir, no que te saquen.
No se puede pretender que por estar enfermo, reconocerlo y aceptarlo, acudir a un especialista o centro … todo el trabajo ya esté hecho.
Obviamente son pasos gigantescos pero el «salto» lo tiene que dar el propio enfermo, porque sino, … no hay nada que hacer.
En definitiva, no esperes que nadie te saque; ¡Hazlo tú mismo!