Desaparecido
Cada vez que «desaparecemos» sin previo aviso y sin dar señales de vida, la angustia se apodera de los que nos esperan.
Pero no es una angustia cualquiera, de esas pasajeras que te pone mal unas horas. No, no es de ese tipo. Es una desesperación total. Incertidumbre, preocupación, miedo,… Una tortura de pensamientos obsesivos y de preguntas sin sentido y sin respuesta: ¿Qué la habrá pasado?,¿Cómo vendrá?, ¿Pero por qué no ha avisado?, ¿Tanto le costaba una llamada? ¿Le espero,no le espero?…
¿Por qué actuamos de este modo?
No todos los alcohólicos siguen el mismo patrón, pero existe un gran número de personas (alcohólicas y no alcohólicas) que son consumidoras y de vez en cuando se comportan de este modo tan infantil e inmaduro.
No suele ser planeado o premeditado, sino más bien por la desinhibición de las primeras copas: Uno sale a tomar algo y sin darse cuenta se calienta. De repente, la conjura de los necios: parece como si todo conspirara para que ese día tuviéramos que beber hasta reventar. Se juntan cuatro compinches, se empieza a tener una alegría desbordada por los efectos iniciales y eufóricos del inicio del consumo, se organizan, cada uno empieza a poner excusas en su casa o llamando por teléfono para poder llevar a cabo sus planes de juerga ilimitada. Pero siempre hay alguno que por miedo a la represalia, por vergüenza, o por simple despreocupación y egoísmo, que apoyado por esa falsa seguridad que le da el alcohol, …se atreve con todo y no avisa, no dice nada, y se deja llevar.
Estas juergas acaban siempre de la misma manera: Consumir al máximo, gastar el dinero que tienes y el que no tienes, desplazamientos de un lugar a otro en busca de más copas y ambiente, y al final una amnesia generalizada que sin saber cómo, todo ese grupo que empezó acaba disgregado con personajes por todos los rincones de la ciudad. Unos regresan al día siguiente, otros «aguantan» hasta el máximo.
En este estado de intoxicación total la forma de pensar es todo lo contrario a lo lógico: Como más horas llevan desaparecidos, más dinero han gastado, más la han liado,… más piensan por qué voy a llamar ahora. Su único pensamiento es: «Ya llegaré cuando llegue y ya veremos»[youtube]https://youtu.be/x59kS2AOrGM[/youtube]