Cuando una, otra, y otra vez sales derrotado … cambia de estrategia.
A veces no solucionamos los problemas porque nos obstinamos en hacer siempre lo mismo para lograrlo aunque siempre tengamos malos resultados.
Especialmente los que somos enfermos alcohólicos, que padecemos una enfermedad pensando que no la padecemos.
De ahí deriva el gran problema y causante de la falta de éxito en la recuperación:la resistencia.
Una resistencia vestida de negación, de no aceptación, de soberbia y orgullo.
No vemos la enfermedad, sólo un problema. Y como concepto de problema, queremos solucionarlo por nuestra cuenta y propios medios, unas veces para demostrar, otras por esa autosuficiencia consecuencia de una percepción distorsionada de la realidad.
Por muchas veces que seamos vencidos … continuamos empecinandonos en resolverlo de la misma manera: Aprender a controlar.
Cuando se ha enfermado … ya no se controla, ya no se aprende a moderar, ya no mandamos nosotros. Cuando se ha enfermado, la necesidad de consumir es la que maneja las riendas de nuestra vida.
El peligro de este comportamiento tan frecuente y común entre los alcohólicos, la absoluta negación, está en el riesgo de empeorar y «algo» que en un principio era un «pequeño problema con el consumo», acabe por convertirse en tragedia o simplemente la ruina de nuestra vida.
Está muy bien eso de buscar alternativas, pero ¿son esas alternativas meras excusas o atajos para conseguir estar bien sin dejar de beber?
Una recuperación alcohólica se fundamenta en tres elementos básicos: Abstinencia, compromiso, y esfuerzo.
Si los intentos o experimentos siempre nos han llevado a la misma casilla de salida, …¡Cambiemos de estrategia!
Tal vez la estrategia no sea luchar contra la enfermedad, sino a favor de la recuperación.
Y, para luchar a favor de la recuperación hay que aceptar la enfermedad, dejarse ayudar, y seguir un tratamiento para emplear y desarrollar unas habilidades que no conocíamos o habíamos dejado de poner en práctica, porque estábamos tan mal que no éramos capaces de verlas.