Para aquellos que aprendemos a vivir sin alcohol

En el submundo de las drogas, siempre hace más ruido o es más vistoso los que no consiguen salir de esa ratonera que los que sí, pero eso no significa que no sean muchos los que salen, escapan, se recuperan, … y aprender a vivir sin la necesidad del consumo.

Que no de falsas esperanzas o no cree expectativas engañosas no quiere decir que no se pueda reflejar «el lado bueno de las cosas» de vez en cuando, y hoy, por ejemplo, así quiero trasmitirlo: Son muchas las personas anónimas, discretas, prudentes, que sin alardes ni hacer mucho ruido van superando esta enfermedad, como es el alcoholismo, y a la vez trasmiten vida a otros con su ejemplo.

De esto …¡Se sale!

No es sencillo, sino más bien mucho más complejo de lo que parece, pero el mejor maestro, guía, y fuerza que se puede dar a personas que se sienten incapaces o sin fuerzas, así como a sus familias que también padecen esa desesperación y tortura, es el ejemplo.

Cada vez que alguien da su testimonio de cómo lo ha conseguido, es luz y fuerza que ilumina a otros motivando y empujándoles a seguir la misma senda.

Mi total admiración a todas las personas que se superan día a día y que siempre mantienen la firmeza, la paciencia, y su experiencia y sabiduría personal para incitar a otros a seguir su modelo.