Alcoholismo: Cuando la realidad supera la ficción

Ser alcohólico no tiene nada de glamuroso ni creativo, ser alcohólico es una putada.

 

¿Puede un actor ponerse en el papel de un alcohólico para intentar interpretarlo y años más tarde acabar convertirse, aún habiendo visto todo lo que sucede en enfermo?

¿Realmente pensáis que todos esos grandes escritores, autores, actores, músicos, pintores, y artistas en general fueron muy creativos porque bebían o se drogaban o sin embargo, lo hubieran sido mucho más y nos hubieran dejado un mejor legado si no lo hubieran enfermado?

¿Llegará una generación que no caerá en la trampa de la desinformación y confusión sobre las consecuencias reales del alcoholismo …?

¿Sabíais que existe un submundo en el interior y más profundo del alcoholismo inimaginable para aquellos que no conocen la enfermedad …?

Más del 90% de la realidad del alcohol y las consecuencias por su dependencia, consumo prolongado, y abuso, se esconden y disfrazan por intereses creados o bien por vergüenza de mostrar ese lado tan oscuro, retorcido en muchas ocasiones, y miserable que nadie cuenta.

El ejemplo claro y que todos conocemos es cuando se cuenta una anécdota divertida sobre un acontecimiento que se ha vivido bajo los efectos del alcohol: En primer lugar, siempre se cuenta la parte divertida y graciosa ocultando la sucia y fea que cada historia alcohólica contiene. En segundo, … se cuenta porque «ha habido suerte» y se está vivo para contarlo.

Muchas anécdotas que nos parecen tan divertidas son exageraciones, confabulaciones, y entremezcladas con una gran dosis de fantasía para exaltar su comicidad.

La realidad no es esa, la realidad no está toda escrita, la realidad no se ve al completo, porque la realidad … siempre supera y superará a la ficción.