El alcohólico tendrá la tendencia a creerse que el alcoholismo no es una enfermedad.

¡Es de cajón: aceptarlo supondría tener que dejar de beber!

«La Organización Mundial de la Salud (OMS) denomina en la actualidad al alcoholismo «síndrome de dependencia del alcohol» y está incluido en el capítulo V [eng.] de la Clasificación Internacional de Enfermedades No. 10 (CIE-10). El alcoholismo forma a su vez parte de una categoría denominada «Trastornos mentales y del comportamiento debidos al consumo de sustancias psicotropas«. Como el sitio oficial está en inglés vamos a citar una definición del documento Cuestionario de Identificación de los Transtornos debidos al Consumo de Alcohol (AUDIT), Organización Mundial de la Salud 2001 …»

A estas alturas no voy a entrar en debates de cuatro pseudo-intelectuales que proclaman (muy probablemente, por mi experiencia, sé que es beneficio propio como reforzamiento negativo de evitación) que el alcoholismo no es una enfermedad porque a ellos mismos, al ser alcohólicos, no les interesa reconocerlo.

Tal vez este tipo de «iluminados» son más listos que nosotros, pero personalmente «Yo no entro en el juego de tronos».

No tengo nada que decir a quién hace apología del consumo, se ríe, o frivoliza, excepto una cosa. ¿Pensarían de la misma manera si sus hijos o allegados directos y queridos padecieran esta enfermedad?

Yo simplemente soy un alcohólico y mi respuesta cuando alguien proclama lo contrario e incluso intenta «enseñarlo y trasmitirlo» que por si acaso, cuando su ego y soberbia sobre sus afirmaciones disminuya un poco, intentan reflexionar sobre sus afirmaciones, … que vengan a mi asociación y miren la cara, los rostros, las expresiones, y la desesperación de los familiares de los enfermos alcohólicos.

Tal vez si hicieran esto … se plantearían este tipo de afirmaciones.

¡Adiós S XX, bienvenidos al S XXI!